El 11 de la #LigaBBVAExperience disfruta de Madrid

"¿Pero cómo vamos a estar en Madrid y nos vamos a ir a dormir ya?" La arenga del colombiano Nico motivó a algunos integrantes de nuestro 11 a vivir la noche tras la cena en el Mesón 5 jotas. Que nadie se alarme: son tremendamente profesionales y a las 10 de la mañana estaban todos listos para salir del hotel dirección al Vicente Calderón.

Si había cualquier síntoma de cansancio, se disipó a la entrada en el templo rojiblanco. El tour por el Estadio Vicente Calderón dejó prendados a nuestros fans latinoamericanos. Salir al terreno de juego y pisar el césped, sentarse en el banquillo y ocupar el área técnica desde la que el Cholo agita a las masas, adentrarse en la historia rojiblanca a través de la sala de trofeos... todas ellas fueron experiencias que impresionaron a unos amantes del fútbol que, desde hoy, son un poco más hinchas del conjunto colchonero.

De allí salieron con hambre de fútbol y a la espera de la traca final que será el partido de mañana, el bus de la #LigaBBVAExperience emprendió rumbo a Vallecas. La parada en Payaso Fofó permitió a nuestro once presenciar el entrenamiento de los franjirrojos, repleto de público a pesar de las inclemencias del tiempo. Puro ambiente futbolero.

¡Qué mañana! Ya no había tanta hambre de fútbol como rugir de estómagos y el almuerzo en el Sport Bar&Lounge Restaurant  posibilitó a nuestros visitantes coger fuerzas de cara a una tarde de lo más cultural. Y es que la siguiente cita del día comenzó en Cibeles y terminó en Ópera previo paseo por el Madrid de los Austrias. La charla, no les mentiremos, versaba más sobre Zamorano, Riquelme o Arango que sobre Velázquez, Felipe III o Don Álvaro Bazán. Imposible evitarlo; adoran el fútbol.

Les dejamos perderse un rato por las calles de la capital y nos volvimos a encontrar a la hora de la cena para acabar el día por todo lo alto en Bodegas Rosell. En el prestigioso restaurante esperaban las peñas de Atlético de Madrid y Granada y la cena se convirtió en un sinfín de risas, cánticos y chascarrillos, todo ello acompañado de las deliciosas 'patatas de la abuela', además de berenjenas y croquetas del lugar, y todo aliñado con el mejor vino de Ribera. ¿Qué más se puede pedir? Sólo vivir un partido de fútbol de la mejor liga del mundo en directo. Pero eso lo contaremos en el próximo capítulo.